La capacidad para gestionar riesgos no solo se debe enfocar en la protección del valor, sino que también debe ser una estrategia fundamental para asegurar la sustentabilidad a largo plazo. Como especialistas en la gestión del riesgo, entendemos que la interconexión de operaciones, la diversificación geográfica y la complejidad de los mercados modernos presentan desafíos únicos que exigen un enfoque estructurado y proactivo.
1. La Gestión del Riesgo: Una Necesidad Estratégica
Con base en nuestra experiencia, sabemos que las corporaciones enfrentan un conjunto diverso de riesgos que pueden impactar significativamente sus operaciones y su reputación. El estándar ISO 31000:2018. Gestión del Riesgo – Directrices, se ha convertido en el estándar de referencia para muchas de estas organizaciones, no solo por su flexibilidad, sino por su capacidad para integrar la gestión del riesgo en todas las áreas estratégicas de la empresa.
Hemos observado que, en organizaciones con operaciones distribuidas a nivel global, los riesgos relacionados con la cadena de suministro, cambios regulatorios y tecnología son particularmente críticos. El enfoque de ISO 31000 permite a estas empresas identificar y asignar estos riesgos, facilitando una respuesta rápida y eficaz.
2. Riesgos Críticos y Soluciones Eficaces
Uno de los desafíos más comunes que enfrentan las corporaciones es la disrupción en la cadena de suministro. Un ejemplo reciente fue la pandemia de COVID-19, iniciada en 2020, que afectó profundamente las cadenas de suministro globales. Las empresas de manufactura, tecnología y bienes de consumo enfrentaron escasez de materiales, retrasos en la producción y aumento de costos debido a la interrupción del transporte internacional. Este evento subrayó la importancia de diversificar proveedores y establecer planes de contingencia robustos, lecciones fundamentales que ISO 31000 ayuda a implementar.
Otro caso reciente que resuena en la comunidad de gestión de riesgos es el Brexit. Desde su implementación en 2020, las empresas con operaciones en el Reino Unido y la Unión Europea han tenido que adaptarse a un nuevo entorno regulatorio y comercial. El Brexit introdujo barreras comerciales, nuevos controles aduaneros y cambios en la legislación laboral, impactando significativamente la logística y los costos operativos. La gestión del riesgo, guiada por un marco como ISO 31000, permitió a muchas de estas empresas anticipar estos cambios y ajustar sus estrategias sin incurrir en costos excesivos o comprometer su conformidad.
La creciente digitalización también ha puesto de relieve los riesgos tecnológicos. En 2021, el ataque cibernético a Colonial Pipeline en Estados Unidos paralizó una de las principales redes de suministro de combustible del país, causando escasez y aumentando los precios de la gasolina. Este incidente destacó la vulnerabilidad de la infraestructura crítica y la necesidad urgente de estrategias de ciberseguridad robustas. A través de la aplicación de ISO 31000, las organizaciones pueden desarrollar un enfoque sistemático para identificar y mitigar estos riesgos, protegiendo no solo su tecnología, sino también su reputación y operaciones.
Finalmente, no podemos ignorar el bloqueo del Canal de Suez en 2021 por el buque portacontenedores Ever Given. Este incidente interrumpió el paso de más de 400 barcos durante seis días, afectando aproximadamente el 12% del comercio global. Las consecuencias incluyeron retrasos significativos en las entregas, escasez de productos y un aumento en los costos de envío. Este evento subraya la importancia de tener rutas alternativas y planes de continuidad de negocio para mitigar el impacto de interrupciones en puntos críticos de transporte global.
3. La Resiliencia como Diferenciador Competitivo
Lo que hemos aprendido trabajando con estas grandes corporaciones es que la resiliencia organizacional no se construye de la noche a la mañana. Es el resultado de una gestión del riesgo bien estructurada, que no solo se enfoca en la mitigación, sino también en la anticipación y la adaptación. Las empresas que adoptan un enfoque basado en ISO 31000 están mejor equipadas para enfrentar las incertidumbres del mercado y convertir los riesgos en oportunidades.
4. Capacitación: El Camino hacia una Gestión del Riesgo Eficaz
Uno de los pilares fundamentales para una gestión del riesgo exitosa es la capacitación continua de los directivos y equipos responsables. Los programas de formación, como el Curso de Certificación ISO 31000:2018 Gestión del Riesgo que ofrecemos en el Instituto de Resiliencia Organizacional, son diseñados para proporcionar a los profesionales las habilidades y conocimientos necesarios para implementar este enfoque de manera eficaz.
Conclusión
En nuestra experiencia, la gestión del riesgo en grandes corporaciones no es solo una función operativa; sino que debe ser un enfoque estratégico que asegura la continuidad del negocio y fomenta la creación de valor. Al integrar las mejores prácticas de ISO 31000 en su estructura, las empresas no solo protegen sus activos y operaciones, sino que también fortalecen su capacidad para innovar y crecer en un entorno global cada vez más desafiante.